La matemática es una disciplina básica en
cualquier desarrollo técnico, lo cual hace que reciba una mayor influencia
desde la tecnología. Por esto separar la enseñanza de las nuevas tecnologías es
una tarea difícil para la mayoría de los profesores de matemáticas.
Usualmente los alumnos solo aprenden “sacar
cuentas” y no saben cuáles son los conceptos matemáticos que hay en el fondo de
esas cuentas, por lo que se debe lograr a través de la enseñanza de las matemáticas
un entrenamiento de la intuición de los alumnos para que descubran por si solos
las propiedades y características de los objetos matemáticos que está
estudiando.
Entre las “nuevas tecnologías” utilizadas en
la enseñanza de las matemáticas están los sistemas de “Enseñanza Asistida por
Ordenador” (EAO), no han tenido mucho éxito en la enseñanza ya que son muy rígidos
en sus funciones ya que por lo general siempre presentan los mismos problemas y
a veces no reconocen distintas representaciones de determinados objetos matemáticos.
Por esto para el trabajo en clases se está implementando el uso de “Asistentes matemáticos” los cuales
ayudan a resolver problemas matemáticos como las calculadoras gráficas y otros software
matemáticos.
Estos Asistentes Matemáticos tienen sus pros
y contras; por un lado ayudan la comprensión de determinados temas, reducen el
tiempo en la realización de cálculos, favorecen el trabajo en equipo, ayudan a motivar
a los estudiantes sobre temas matemáticos, entre otras. Pero por otro lado su
uso puede ocasionar que el alumno se interese más por la utilización de la
herramienta que por lo que tiene que hacer con ella, también puede hacer que pierda
destrezas básicas para la resolución de problemas y que genere confianza ciega
en la maquina perdiendo así el sentido crítico.
Si bien las herramientas informáticas son
necesarias, se debe hacer uso correcto de las mismas en el proceso enseñanza-aprendizaje,
por lo que el docente debe escoger bien cuál o cuáles herramientas van a
utilizar y en qué momentos va a hacerlo para no desviar el propósito de las
mismas. Además, el profesor no debe alejarse totalmente de la enseñanza tradicional
ya que de hacerlo solo estaría enseñando a “usar las herramientas informáticas”
o a “sacar cuentas” el cual no es el objetivo de la enseñanza de las matemáticas
que es desarrollar el conocimiento, análisis y manejo de los objetos matemáticos
para la resolución de problemas.